ANSIEDAD: QUÉ ES Y CÓMO IDENTIFICARLA

La ansiedad es una experiencia común que afecta a muchas personas en diferentes grados. Aunque es normal sentir un cierto nivel de ansiedad en situaciones estresantes, como antes de una presentación importante o un examen, para algunos, la ansiedad puede convertirse en un problema crónico y abrumador, que puede afectar el día a día de quién la padece. 

En este artículo, exploraremos cómo identificar los síntomas de la ansiedad y cómo manejarlos de manera efectiva.

Introducción a la ansiedad

La ansiedad es uno de los trastornos más comunes en la población en general. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2019, 301 millones de personas en el mundo tenían un trastorno de ansiedad, esto representa un 4% de la población mundial. Se estima que, luego del 2020, esta cifra incrementó en un 26%. Puede afectar a personas de todas las edades.

La ansiedad es una sensación de preocupación o miedo que genera malestar, que puede hacer que la persona que la padece se sienta incapacitada para realizar sus actividades cotidianas con normalidad.

La ansiedad se manifiesta de diferentes formas en cada individuo. Algunos pueden experimentar una sensación constante de preocupación o miedo, mientras que otros pueden experimentar ataques de pánico repentinos y paralizantes.

Entender la ansiedad y su impacto en el bienestar emocional

La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones estresantes, pero cuando se vuelve crónica puede tener un impacto significativo en nuestro bienestar emocional. El ritmo acelerado de la sociedad actual puede generar un aumento en los niveles de ansiedad, lo que a su vez afecta nuestra salud mental y emocional. La ansiedad puede manifestarse de diferentes formas, como preocupación constante, miedo irracional, dificultad para concentrarse y problemas para conciliar el sueño. Es importante reconocer los signos de la ansiedad y buscar formas efectivas de manejarla.

Cabe destacar que la ansiedad es una emoción normal en los seres humanos, que todos podemos experimentar en algún momento de nuestras vidas. De hecho, la ansiedad, en su justa medida, está diseñada para ayudarnos en ciertas situaciones donde nuestra vida pueda estar en peligro, ya que detona respuestas de estrés para huir o enfrentar dicho peligro. Es un instinto de supervivencia que desarrollaron nuestros antepasados hace miles de años. Por ello cuando aparece, muchas veces no debe ser motivo de preocupación.

Sin embargo, cuando la ansiedad se vuelve excesiva y persistente, o empieza a interferir en nuestras actividades cotidianas, puede ser considerada como un desorden mental.

¿Cuándo la ansiedad pasa a ser un problema?

Los expertos en salud mental indican que la ansiedad pasa a ser un problema si:

• La sensación de ansiedad es muy fuerte y persiste por mucho tiempo.
• Los miedos y preocupaciones son desproporcionales con respecto a la situación que se presenta.
• Evitas las situaciones que pueden hacerte sentir ansioso.
• Sientes que la ansiedad es difícil de controlar.
• Se hace difícil hacer las actividades del día a día que normalmente disfrutas.
• Regularmente experimentas síntomas de ansiedad que pueden incluir ataques de pánico.

Manifestaciones de la ansiedad

La ansiedad se puede manifestar de diferentes maneras. Algunas de ellas son:

Trastorno de ansiedad generalizada (TAG): Se caracteriza por una preocupación excesiva y persistente que interfiere con la vida cotidiana.

Trastorno de pánico: Se caracteriza por ataques de pánico repentinos e inesperados que pueden causar una gran cantidad de miedo y malestar.

Trastorno de ansiedad social: Se caracteriza por un miedo intenso a situaciones sociales en las que la persona se siente expuesta y evaluada por los demás.

Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC): Se caracteriza por pensamientos y comportamientos repetitivos e intrusivos que pueden ser muy perturbadores.

¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?

La ansiedad puede afectar la mente, el cuerpo y el comportamiento. Por lo cual, los síntomas que se pueden manifestar son los siguientes:

• Nerviosismo o inquietud.
• Dificultad para relajarse.
• Dificultad para concentrarse.
• Dificultad para tomar decisiones.
• Irritabilidad.
• Fatiga.
• Problemas para dormir.
• Dolores de cabeza.
• Dolores musculares.
• Problemas digestivos.
• Mareos.
• Palpitaciones.
• Sudoración.
• Temblores.
• Sensación de ahogo.

El impacto de la ansiedad en la salud física.

La ansiedad puede tener un impacto significativo en la salud física de una persona. Puede aumentar el riesgo de desarrollar una serie de afecciones, como:

• Enfermedades cardíacas: La ansiedad puede aumentar la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la tensión arterial. Esto puede incrementar el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.

• Enfermedades respiratorias: La ansiedad puede causar dificultad para respirar, tos y sibilancias. Esto puede empeorar las afecciones respiratorias existentes, como el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

• Enfermedades digestivas: La ansiedad puede causar náuseas, vómitos, diarrea y estreñimiento. Esto puede interferir con la absorción de nutrientes y aumentar el riesgo de desarrollar trastornos digestivos, como la enfermedad inflamatoria intestinal (EII).

• Enfermedades musculoesqueléticas: La ansiedad puede causar dolor muscular, rigidez y fatiga. Esto puede dificultar el movimiento y aumentar el riesgo de lesiones.

• Además de aumentar el riesgo de desarrollar estas afecciones, la ansiedad también puede empeorar los síntomas de las afecciones existentes. Por ejemplo, la ansiedad puede empeorar el dolor de una persona con artritis o la dificultad para respirar de una persona con asma.

Conclusiones

La ansiedad también puede afectar la calidad de vida de una persona. Puede dificultar el trabajo, las relaciones y las actividades cotidianas. Las personas con ansiedad pueden tener dificultades para concentrarse, tomar decisiones y dormir. También pueden ser más propensas a sufrir accidentes y lesiones.

También está demostrado científicamente que la ansiedad puede tener un impacto significativo en la salud física de una persona. 

Si experimenta ansiedad, es importante buscar ayuda profesional. El tratamiento puede ayudar a controlar los síntomas y mejorar la salud física y mental. Las terapias holísticas pueden ayudar a complementar el tratamiento médico asociado a la ansiedad.